Picky eater se traduce como «comedor quisquilloso».

Este término se usa para definir a niños que reúnen las siguientes características:

  • Comen una variedad limitada de alimentos.
  • Sienten rechazo ante nuevos alimentos, sabores o texturas.
  • No siente interés ni disfrutan de la comida.
  • Tienen una dieta diferente al resto de la familia.

¿Cuáles son sus causas más frecuentes?

  • Aversiones individuales. Propias de nuestra personalidad, no a todos nos gustan los mismos sabores, texturas u olores.
  • Aversiones del entorno. Las aversiones de los padres o cuidadores habituales se pueden reflejar en los niños.
  • La escasa diversidad en la alimentación de casa puede generar rechazo a los alimentos que salen fuera de lo habitual.
  • Sensibilidad a los nuevos sabores y nuevas texturas.
  • Poca exposición o exposición tardía a nuevos alimentos
  • Asociación a síntomas: experiencias negativas al probar nuevos alimentos pueden provocar el rechazo.
  • Personalidad del niño.

Consecuencias:

  • Poca ingesta de frutas y verduras, puesto que suelen ser el grupo más rechazado
  • Dieta muy poco variada y saludable, nos exponemos a deficiencias nutricionales como vitaminas o minerales esenciales.
  • Estreñimiento

¿Qué cosas favorecen su desarrollo?

  • Usar premios o castigos para que coman.
  • Usar tablets, teles o móviles para distraerles de lo que comen.
  • Presionar a al niño.
  • Establecer una cantidad obligatoria que debe comer.
  • Manifestar una preocupación excesiva por la alimentación del niño.

¿Cómo mejorar esta conducta?

  • Realizar las comidas en familia:
  • Ser un buen ejemplo es el mejor y mayor impacto para los niños. Debemos comer todos lo mismo.
  • Fomentar un ambiente agradable durante las comidas, hablar de cosas agradables o cotidiana.
  • Establecer un horario estable de comidas.
  • NO CASTIGAR NI PREMIAR con comidas.
  • NO OBLIGAR A COMER, hay que entender que ellos también tendrán sus gustos y habrá cosas que no les gustan.
  • Seguir ofreciendo aunque lo rechacen, puede que sea agotador, pero muchos niños terminan aceptando ciertos alimentos con paciencia.
  • Cuidar la presentación del plato, y ofrecer un nuevo alimento en poca cantidad junto con uno ya aceptado.
  • No esperar cambios rápidos y estables.

Cambiar el comportamiento y costumbres de un niño Picky eater requiere paciencia y tiempo, no hay atajos.
Es un aprendizaje nuevo para toda la familia, los niños aprenden a comer mejor y los familiares aprenden a alimentar mejor, aprenden a entender los gustos y límites del niño y a buscar la mejor forma de ir superando barreras juntos.

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